Con 14 años de edad obtuvo la presea dorada en la olimpiada mundial femenina de matemática en Ucrania. Sueña con ser ingeniera biomédica para poder ayudar a las personas más necesitadas.
Cuando cursaba el tercero de primaria descubrió su gusto por la matemática y desde entonces su pasión la ha llevado a ganar la medalla de oro en la Olimpiada Europea Femenina de Matemática 2019 (EGMO, por sus siglas en inglés), evento que convoca cada año a las mejores exponentes de la matemática de todo el mundo.
Recuerda que era su segunda participación en esta olimpiada y que no pensaba alcanzar el máximo premio. Sin embargo, lo consiguió y ese triunfo le ha servido para creer en sí misma y convencerse de que había elegido bien el camino.
“Fue una gran sorpresa para mí lograr esta medalla. Mis padres se emocionaron mucho, recibí muchas felicitaciones. Fue un sueño hecho realidad que me dio más confianza para competir internacionalmente”, dice Carla, quien este año ingresa al 4. ° de secundaria en el colegio Saco Oliveros.
Fue, justamente, en esta entidad educativa donde conoció el mundo fascinante de la matemática y comenzó su preparación hasta obtener logros nacionales e internacionales sobre la base del estudio y la perseverancia. “Encontré en el colegio un grupo de amigos que tenían muchas ganas de aprender y sobre todo la motivación de representar al país en olimpiadas internacionales”, afirma.
Igualdad de oportunidades
Carla ha participado en tres olimpiadas internacionales de matemática y ha visto como en cada una de ellas el número de mujeres viene en aumento, y no solo ello, sino que logran los mayores puntajes, como fue el caso de la reciente olimpiada Máster de Matemática de Rumania en la que una estudiante de Serbia obtuvo la más alta nota.
“Me sorprendí al ver un buen grupo de mujeres representando a sus países, aunque los hombres son la mayoría, creo que cada año hay más participación femenina”, refiere Carla
La celebración del Día Internacional de la Mujer la encuentra preparándose para la EGMO 2020, que se desarrollará del 15 al 21 de abril en Países Bajos. Asimismo, nos representará en julio en la Olimpiada Internacional de Matemática (IMO) a realizarse en Rusia, evento que convoca a más de 100 países.
Respecto del tema de la mujer, ella es consciente de que se han realizado muchos avances, pero que aún existe un largo camino por recorrer en la lucha por el derecho que tienen las mujeres a la igualdad de oportunidades.
“Lo que necesitamos es que se promuevan y se difundan más los concursos de matemática para que más chicas puedan competir y, en general, crear más oportunidades para demostrar de lo que somos capaces”, sentencia Carla.
Compromiso social
Nuestra campeona tiene un sueño, la de ayudar a las personas más necesitadas. Y desde ahora se viene preparando con mucho ahínco en sus cursos de ciencia, ya que piensa optar por una carrera que combine la tecnología y la medicina. “Me gustaría estudiar Ingeniería Biomédica para crear soluciones que mejoren la calidad de vida de la gente”.
Su sueño no queda allí. Ella quisiera también contribuir a crear centros especializados de salud donde se pueda atender a bajo costo los problemas de salud y de discapacidad. Para ello, sabe que tiene que prepararse hasta convertirse en una gran profesional.
“Espero poder aplicar a una beca en alguna universidad del extranjero. Me han dicho que en Francia existen buenos laboratorios. Pero si no es posible, aquí también hay buenos centros de estudios como la Católica que ofrecen esa carrera, ojalá pueda tener la oportunidad de acceder a una de ellas”.
Logros
Con 6. ° grado de primaria, Carla logró superar los exámenes de admisión de San Marcos y del Callao. Luego, ganó algunos concursos de matemática locales y nacionales. Posteriormente, alcanzó lo que hasta ahora es su mayor triunfo: la medalla de oro en la EGMO.
Este año obtuvo la medalla de plata en la 30. ° Olimpiada de Matemática del Cono Sur, realizada en la ciudad de Sucre, Bolivia.
Y esta semana regresó de la olimpiada Máster de Matemática de Rumania, considerada la más difícil del mundo, donde se hizo acreedora de una mención honrosa.
A su corta edad, se ha convertido en un ejemplo de esfuerzo y dedicación al estudio para las niñas y mujeres del país. Y ella lo sabe, y nos dice que tratará de no defraudarlas.